Llevo algunos días de capa caída así que me identifico un poquito, solo poquito, con esta entrada. Las entradas en Google con respecto a la depresión son aproximadamente 10.000.00 (en menos de 0.23 segundos). Increíble. Lo peor, visitantes, es que la depresión es una enfermedad muy corriente, casi tanto como los resfriados de invierno. Mucha gente la padece y ni siquiera es consciente de ello. Está claro que hay muchos tipos de depresión, y muchos grados dentro de cada tipo, pero en general la depresión es algo muy normal. Puede ocurrir varias veces en la vida de una persona o simplemente padecerla una vez. Eso depende de muchas cosas, pero sobretodo de la persona. Como casi todo en la vida.
En muchas páginas web (algunas confiables, otras no) se comenta que la mujer es mucho más propicia a esta enfermedad que el hombre. Aquí, según mi inexperto punto de vista, tengo que discrepar. ¿Mujeres?¿De verdad? Como acabo de decir la depresión depende de la persona, hay hombres que son débiles de carácter y mujeres muy fuertes, así que no lo entiendo. Puede ser que la mujer ha estado más sometida al escrutinio de la sociedad y a la presión de la misma desde hace más tiempo y que esto influya, pero, por favor, ¿hoy en día? No lo creo. En cualquier caso ya he dicho que soy inexperta en este ámbito, así que no me hagáis caso.
Lo único que quiero recalcar es la poca importancia que se le da a las depresiones, cuando en realidad deberíamos estar más atentos a ellas e intentar ayudar a quienes las padecen. Bueno, después de sonar como un anuncio de televisión, me despido de nuevo. [Espero que en algún momento se preste más atención a las cosas que pasan bajo nuestras narices y que nos negamos a ver.]